En el corazón de los almacenes: hacer del bienestar un motor de rendimiento
Entrevista con Laurence de Faveri, Directora de Recursos Humanos de Logística
En el lugar de trabajo, la calidad de vida y las condiciones de trabajo (CVT) han dejado de ser un lujo para convertirse en una necesidad. Especialmente en sectores como la logística, donde las limitaciones físicas y organizativas son importantes, replantearse el bienestar en el trabajo se está convirtiendo en un imperativo tanto humano como económico. Una empresa que cuida de sus empleados es una empresa que se da la oportunidad de tener éxito a largo plazo.
El sector de la logística se enfrenta a retos particulares en términos de condiciones de trabajo. Los empleados trabajan en entornos en los que están expuestos a importantes limitaciones físicas: movimientos repetitivos, transporte de cargas, conducción de maquinaria y exposición a variaciones de temperatura. Estas profesiones, esenciales para el buen funcionamiento de nuestra economía, merecen una atención especial y cuantiosas inversiones para garantizar la salud y el bienestar de quienes trabajan en ellas.
Convertir las limitaciones en oportunidades
Ante estos retos, las empresas tienen que elegir: tomarlo o dejarlo. El primer paso es replantearse por completo el lugar de trabajo. Crear entornos en los que los empleados puedan trabajar en un ambiente cuidado y atractivo.
Este planteamiento va mucho más allá de la estética. Forma parte de una filosofía más amplia: crear un sentimiento de pertenencia y reconocimiento. Cuando un empleado vuelve a casa después de pasar el día en un entorno agradable, su motivación y su compromiso profesional se ven reforzados.
Las salas de descanso ya no deben ser zonas “secundarias”, sino verdaderos espacios vitales donde los empleados puedan recargar las pilas. JJA, a través de su entidad logística Easy Logistique, ha diseñado estas confortables áreas, zonas de relajación equipadas con el mismo mobiliario que los empleados manejan en los almacenes. El objetivo es garantizar la coherencia entre la actividad profesional y el entorno de trabajo, lo que genera orgullo y apropiación.
Más prevenir que curar
La prevención de riesgos laborales es otro pilar fundamental del éxito de cualquier planteamiento QHCT. Los trastornos musculoesqueléticos y los accidentes relacionados con la manipulación o conducción de maquinaria son los principales riesgos a los que están expuestos los empleados de logística. En lugar de tratarlos a posteriori, hay que actuar en fases previas.
Las iniciativas pueden aplicarse a varios niveles. En los almacenes de JJA, los empleados practican el despertar muscular al comienzo de su turno, para que los equipos entren en calor y preparen sus cuerpos para los esfuerzos del día. En los centros logísticos se utilizan exoesqueletos para ayudar a los empleados a transportar cargas pesadas. También se dispone de otros equipos innovadores, como flejadoras que limitan la flexión y filmadoras automáticas que reducen el esfuerzo físico.
En JJA, estas inversiones van acompañadas de un amplio programa de concienciación y prevención sanitarias. Periódicamente se organizan talleres de prevención sobre diversos temas (cáncer de mama, cáncer de próstata, adicciones). Cuidar de nuestros empleados significa apoyarles en todos los aspectos de su bienestar.
Innovación al servicio de las personas
Las nuevas tecnologías desempeñan un papel cada vez más importante en la mejora de las condiciones de trabajo. La digitalización de nuestras empresas -con el uso de tabletas, comandos de voz para la preparación de pedidos y realidad virtual para la formación en seguridad- permite simplificar tareas, aumentar la eficiencia y mostrar a nuestros empleados la atención que prestamos a su trabajo invirtiendo en estas tecnologías. También requiere un apoyo especial para los empleados.
JJA invierte en la formación y profesionalización de sus equipos para que estos avances tecnológicos se vean como oportunidades y no como limitaciones. Es este enfoque benévolo el que nos permite sacar provecho de los cambios y acostumbrar a nuestros empleados a las nuevas tecnologías. Este compromiso refleja nuestra voluntad de desarrollar las competencias y promover el progreso social de todos y cada uno de nuestros empleados.
Creación de vínculos y reconocimiento
Más allá de los aspectos técnicos, es esencial crear vínculos entre todos los empleados, ya trabajen en el almacén o en la sede central. En JJA, esto se consigue organizando eventos relacionados con la actualidad deportiva, retos conectados y festividades anuales. Esta dimensión social del QWL es esencial y debe ir acompañada de otras medidas, como la valoración de los empleados. La introducción de un periódico interno ha permitido comunicar los proyectos individuales y los éxitos colectivos para dar a conocer a los empleados a diario.
Tenemos que aprovechar al máximo el trabajo realizado en el almacén. Tenemos que conectar a los empleados lo más estrechamente posible con la actividad general de la empresa y darles una experiencia de empleado comparable a la del personal de la oficina central. Es a través de estas acciones como realmente cuidamos a nuestros equipos.
Un factor diferenciador decisivo
Un planteamiento ambicioso en materia de buenas condiciones laborales tiene un impacto real en el atractivo de las empresas. En un sector como el de la logística, en el que las empresas compiten por el talento, ofrecer buenas condiciones de trabajo se está convirtiendo en un importante factor diferenciador. Por el mismo salario, un candidato elegirá naturalmente la empresa que le ofrezca el mejor entorno de trabajo.
Esta lógica virtuosa beneficia a todos: los empleados trabajan en un entorno satisfactorio, la empresa refuerza su atractivo y su rendimiento, y la sociedad en su conjunto avanza hacia estándares más elevados en términos de condiciones laborales.
Los beneficios económicos de este planteamiento son reales: reducción de los índices de siniestralidad, menor rotación del personal, menos absentismo y mejora de la productividad. Pero más allá de estos beneficios cuantificables, lo que cuenta es la dimensión humana.
Construir juntos el futuro
Promover el reconocimiento y actuar sobre el bienestar significa crear las condiciones para una empresa más justa y eficiente. Cuidar de nuestros empleados significa invertir en un futuro compartido. Porque una empresa que sitúa a las personas en el centro de sus preocupaciones es una empresa que crea valor sostenible, para sus empleados y para sus clientes.
